Por Bolívar Balcacer
En el día de ayer a prima noche recibí una información que impactó mi día después de un agotador proceso de trabajo, fue la noticia del principio de derrame de mi hermano Feliz Vinicio Lora.
Llegué a la casa aturdido, casi no pude dormir, mi ansiedad por saber cada segundo como va todo ha sido infinita, no espero lo peor, nunca a pasado por mi mente, pero lo que más me preocupa es lo olvidadizo de nuestra gente en estos tiempos difíciles, la mejor muestra está en Yaqui, en Luisito y otros tantos.
Por eso al igual que algunos compañeros pido al poderoso, al gran arquitecto del universo que participe en la pronta recuperación de este gladiador de mil batallas que es Feliz Vinicio, hace unos días realizamos un chat de varias horas, allí hablamos de todo, de los planes futuros en favor de los miembros de Acroarte, de su interés por internacionalizar la institución y llevar el nombre a otros países con acuerdos de trabajo, en ese chat me pidió que usara las relaciones de FIPED para abrir puertas y eso ya lo iniciamos, en el chat hablamos de mi interés de apoyar cien por ciento a Cesar Dalmasí, cosa que él felicito diciendome de la calidad humana que tiene el compañero Dalmasí.
Hablamos muchas cosas importantes para la clase, pero el destino siempre, el inquietante destino volvió a jugar pesado y esta vez con Feliz Vinicio, la presión a la que fue sometido a raíz de los preparativos del Casandra al parecer le han tambaleado, pero los grandes generales nunca se arrodillan, es el caso de este soldado del triunfo, General de Generales.
Te recuperarás hermano, lo sabemos, el señor está en este negocio por tu salud y sabemos que todo saldrá bien y podremos continuar la jornada de trabajo que hemos iniciado para bien de los nuestros aunque la institución esté saturada de gente que no piensa en ella.
Sé que tu volverás a Telecentro a tu programa “Ha llegado la hora”, sé, que volveras con más fuerzas a Acroarte, sé que saldrá fortalecido de la unidad de cuidados intensivos de la clínica porque Dios está contigo y la ciencia especializada también.
Estoy confiado en el neurólogo Luis Pichardo, tu eres un orgullo de la comunicación a parte de ser un exitoso profesional que ha impuesto su sello no sólo en la crónica artística, sino en todos los proyectos en los que te has involucrado durante tu larga trayectoria.
Cuidado campeón, tienes que ganar esta nueva batalla porque los soldados como tu son los que verdaderamente saben dirigir multitudes y llevarlas al éxito como ha pasado en dos oportunidades en Acroarte.
Hasta nuestro próximo comentario
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