Por: Paola Guerrero
Ayer viernes, Telefutura transmitió el capítulo final de una de las historias más conmovedoras dentro de la pantalla chica que nos reiteró el concepto universal de amor por encima de cualquier cultura, creencias y prejuicios. Se trata de India, la impecable producción brasileña merecedora de un premio Emmy y que ha sido transmitida en más de siete países.
Este drama escrito por Glória Perez (El Clon) y producida por la poderosa cadena brasileña Rede Globo, narra de manera precisa y sin provocar cansancio, la vida de múltiples personajes con perfiles elaborados y profundos, ubicados en distintos marcos culturales, que incluye los majestuosos escenarios de la India.
Los giros de esta historia han sido tan definitivos como sorpresivos, lo cual hace difícil predecir su final. Lo que sí queda claro es su mensaje despojado de polarizaciones sin perder la noción de la inevitable complejidad humana y de la vida. Y para esto, el selecto casting integrado por Juliana Paes, Márcio Garcia, Rodrigo Lombardi, Tony Ramos y Letícia Sabatella, entre otros, lo pudieron demostrar apoyados por un elaborado vestuario y escenografías.
En definitiva “Caminhos das Indias”, como se titula en su país de origen, se convertirá en otro clásico junto a su obra hermana de El Clon, las cuales serán inigualables sin dejar espacio a otras versiones que sólo le aportarían redundancia al público.
India es un poema audiovisual dedicado al amor, la tragedia, la rendición y la sobrevivencia en sociedades que premian y castigan a veces al que no deben. Sin embargo, estos retratos que traspasan fronteras sólo pudieron ser tomados y actuados por manos brasileñas, que junto al fútbol, sus caipiriñas y la samba, conservan el trono como los mejores en su género, así esto les requiera sentir, pensar y actuar despojados de su propia cultura que los caracteriza. ¡Namaste!
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