Por quién votar por Felix Vinicio o Cesar Dalmasí en Acroarte.

Por Bolivar Balcacer.
Tomado de martilloyclavo.com
En los últimos meses, me he dedicado a seguir como ratón de biblioteca cada una de las notas que emanan de las oficinas de campaña de Cesar Dalmasí y de Feliz Vinicio Lora los que pretenden dirigir a acroarte como presidentes.

Ambos tienen un historial fabuloso de trabajo y ambos tienen la creencia que al final de la jornada contarán con el apoyo del voto de los acroartistas, en ese trajín también he leído como 20 veces los estatutos de todas formas, he buscado documentos donde quiera que pueda encontrarlo para alimentar mi hemeroteca virtual y el fólder que he destinado a Acroarte.

En Cesar Dalmasí he visto a un ser humano integro, disciplinado, comedido y diáfano que en su hablar demuestra una gran preocupación por la clase artística dominicana y por Acroarte como plataforma de apoyo a ese sector cultural de la dominicanidad.

En el Caso de Feliz Vinicio, he encontrado a un personaje recio, firme en sus posturas, con visión clara de lo que busca y lo que desea para la institución y con una mano dura que le ha ocasionado en el mayor de los casos algunas repulsas por parte de gente que no sabe respetar la disciplina y ante su acorralamiento han apelado al recurso del invento malsano.

Ambos contendientes reúnen cualidades para dirigir a acroarte de la mejor manera y sacarlo del precipicio donde lo han metido sobre todo después de los 25 años de los premios casandra que constituyeron un verdadero “arroz con mango” que dejo muy mal parada a la actual presidenta y que decir de la transmisión de televisión al menos para ultramar.

Pero lo más preocupante de ambos candidatos a mi entender, es que se han limitado solo a exponer de forma suelta sus deseos y no lo han plasmado en papel, demostrando que realmente quieren el crecimiento de la institución, aunque han apuntalado algunos correctivos, ninguno de los dos se ha adentrado a plantear la necesaria medida de estudiar los estatutos para someter nuevos cambios que le permitan a la institución entrar al modernismo y al cambio tecnológico que vive el mundo hoy.

Ambos tienen el deber de producir una autentica revolución en acroarte que devuelva la fe perdida y que le de confianza a los miembros de las filiales e incluso plantearse una pulga a lo interno para sacar “garrapatas y chinches” que manchan el honor de la agrupación y la memoria de Casandra Damirón.

Esa Revolución debe estar basamentada en aprovechar las opiniones: Se debe promover la producción de nuevas ideas, a partir de la asociación o perfeccionamiento de otras ya sugeridas,

Cuantas más ideas se produzcan mejor: Ya que hay más probabilidades de que a través de ellas se llegue a la idea superior. Está prohibido decir: "Es suficiente con esas ideas", por lo que debe estimularse la generación hasta que las ideas se agoten, en esa parte jugarán un papel estelar los ex presidentes que en cierta medidas, se notan apáticos aunque tengan sus preferencias entre los candidatos, ellos están en el deber de darle vida a acroarte mandando un mensaje de fortaleza total

Esa revolución se enmarca en los postulados del pensador Chino SUN TZU “Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla”. La verdadera revolución debe empezar por la alta instancia de acroarte, la que dormita todo el año para despertar como la marmota a buscar de que comer sabiendo que termina la temporada de frió, están en el deber de contagiar a todos y cada uno de sus colaboradores como si de una plaga se tratara.

Es en ese sentido en el que deben ser revolucionarios. Estimulando, provocando y ejecutando el cambio. Primero en ellos como individuos y a continuación en las personas que los rodean. El efecto dominó.

Los miembros de Acroarte (filiales) también tienen su cuota pues no pueden limitarse a ser “momias” que solo sirven para levantar la mano o esperar un ticket para ir al casandra, como lideres están en la obligación de participar de esa Revolución que hoy señalamos, siendo motores de éxito y ayudando a los demás lideres de la institución, tienen que entender que los verdaderos líderes consiguen en sus equipos el famoso efecto “banco de peces”. Todos trabajan en la misma dirección, sincronizados y reaccionan a los cambios de la misma manera, siendo difícil identificar quién fue el primero en iniciar el movimiento.

Sean revolucionarios, provoquen el cambio desde arriba, sean tenaces y constantes y lo demás vendrá solo. Ustedes son los responsables de facilitar la adaptación al cambio. Sean visionarios. No desfallezcan en sus propósitos porque sólo los tenaces y perseverantes lo consiguen. El resto se queda en el camino lamentándose o echando la culpa a los demás. Como dijo algún famoso gurú, ahora no son los grandes los que se comen a los pequeños, son los veloces los que se comen a los lentos.

Feliz Vinicio Lora y Cesar Dalmasi , no pueden quedarse en la retórica y en la vocinglería, tienen que demostrar su verdadero deseo de hacer crecer la institución, ellos saben que necesita oxigeno, que está en estado de coma aunque algunos quieran demostrar lo contrario, ambos candidatos tienen que presentar una plataforma de trabajo que sea realizable no una plataforma que solo venda sueños utópicos, en ese sentido es responsabilidad de los miembros con derecho a voto, escoger de los dos el que realmente reúna las mejores condiciones sin importar favoritismo sino la agrupación como embajada cultural del artista desde dominicana.

Emitir un voto de conciencia, pero exigiendo un trato igualitario que le de la misma dimensión al miembro de la Capital como al de Miami, New York, Santiago y otros puntos.

Ser revolucionarios como directivos o líderes implica producir cambios profundos y perdurables. No conformarnos con lo establecido. Ver las cosas desde otra perspectiva. Ser creativos. Hacernos preguntas continuamente y encontrar las respuestas. Observar nuestro entorno desde una cierta distancia y ser objetivos. No hacer las cosas porque siempre se han hecho así o porque es la costumbre.

Abraham Maslow expresó: "Cuando la única herramienta que posees es un martillo, cada problema empieza a parecerse a un clavo". Cambiar de estrategia te llevará a cambiar el punto de vista acerca de él. El hecho de seguir insistiendo en estrategias y planes que no te resultan, no te permitirá vislumbrar otras posibles soluciones. Para graficarlo de alguna manera: pasar al otro lado de él: ¿cómo lo ves ahora? ¿Continúa en ese grado de dificultad que lo veías antes? ¿Observas una nueva y posible solución? Nuevas estrategias y nuevos métodos te acercarán a resultados exitosos.

A la hora de escoger el próximo presidente de Acroarte ya sea Feliz Vinicio Lora o Cesar Dalmasí, deben ustedes estar claros de que ese voto que devolverá la fe perdida y la institucionalidad a la agrupación se emite porque el candidato que se escoja reúne varias condiciones que favorecen al conglomerado y repercuten a nivel no solo de la patria y sus artistas sino de todos los dominicanos, los que deben sentirse orgullosos de la agrupación que fuente de alegría con periodistas respetables en su interior.

Ese voto debe visualizarse en base a que el próximo presidente:

Tiene una visión ilimitada y está comprometido con la excelencia.
No se desvía de la persecución de la visión - es su meta.
Su pasión no tiene límites.
Tiene una atención fija en los resultados.
El trabajo en equipo es la prioridad - consigue seguidores voluntarios.
Exige una intensidad concentrada y un sentido definido de destino u objetivo.
Está convencido de que: Si esperamos a que nuestros temores se disipen para iniciar algo, nunca lo iniciaremos.
Esta claro en el crecimiento tecnológico y sacará el máximo al mismo
Cree en la ampliación de la institución abriendo las puertas a nuevos miembros
cree en la igualdad de criterios.
Acroarte necesita hoy más que nunca:

La gente que construya el crecimiento con visión Mundial.
La gente que hace que los cambios sucedan.
La gente que apoya a quienes hacen los cambios.
La gente que sabe aguantar el dolor que viene en el cambio.
Los líderes fuertes que se levantan y se mantienen firmes en los momentos difíciles que vienen con el cambio.
La determinación demostrada por esa gente al enfrentar los cambios.
La gente que no le tiemble el pulso para expulsar a los desaprensivos que avergüenzan a la institución
Una organización que quiera llegar a ser de clase mundial debe contar con esa energía y esas características de liderazgo, estos elementos se unen para crear una cultura de cambio y progreso. Y aunque el cambio no es fácil, ni se consiguen fácilmente líderes con visión, cuándo se consiguen, se sabe que el timonel del barco propiciará la llegada satisfactoria al puerto.

Concluyo llamando a los votantes de acroarte donde quiera que estén, a pensar antes de votar que por encima de las pasiones está la institución y en ella está reflejada la clase artística dominicana, la que a su vez sirve de embajadores culturales donde quiera que se presentan, escojamos de los dos al mejor y al que llene mejores anaqueles de progreso, ambos son excelentes y ambos reúnen condiciones para llevar a más alto nivel a ACROARTE, que el voto sea de conciencia.

Hasta nuestro próximo comentario