Encuesta de la semana: una nueva encuesta de Marquette Law School encuentra al ex vicepresidente Joe Biden con una ventaja del 46% al 43% sobre el presidente Donald Trump en Wisconsin.
La encuesta coincide con la última encuesta de Marquette, que también tenía a Biden por 3 puntos en Wisconsin.
Cuál es el punto: una de las grandes preguntas cuando miramos las encuestas nacionales es si son o no una representación precisa de lo que está sucediendo a nivel estatal. Una de las formas más fáciles de verificar es comparar los resultados de las encuestas estatales con el voto presidencial anterior en un estado determinado. Lo hice para todas las encuestas telefónicas que llamaron a teléfonos celulares desde principios de abril.
Cuando promediamos estas encuestas estatales, sugieren que Biden está corriendo unos 6 puntos por delante del margen final de Hillary Clinton.
En otras palabras, las encuestas a nivel estatal sugieren que Biden tiene una ventaja nacional de alrededor de 8 puntos.
Eso es en realidad un poco mayor que los 6.6 puntos que Biden tiene en el promedio nacional de alta calidad obtenido durante el mismo período. Debo señalar que si consideramos el promedio de las encuestas estatales para la población de cada estado, obtenemos un margen justo al norte de esa marca de 6.6 puntos. (La ponderación por población nos deja algo más susceptibles a encuestas atípicas, ya que tenemos menos encuestas de los estados más poblados).
De otro modo, todos los métodos coinciden en que Biden tiene una ventaja nacional bastante considerable.
Examinar las encuestas estatales tiene la ventaja de tener muchos más puntos de datos para jugar, por lo que me siento bastante seguro de que nos están dando una instantánea decente. Estamos viendo más de 20 encuestas y más de 15,000 entrevistas. El margen de error agregado es pequeño.
Además, podemos ver los estados que esperamos sean al menos algo competitivos (es decir, aquellos en los que el margen estuvo dentro de los 10 puntos la última vez) y aquellos que no creemos que estén cerca en 2020.
En los estados competitivos (donde se han realizado la mayoría de las encuestas estatales), ha habido un cambio promedio de 6 puntos hacia Biden en comparación con el resultado de 2016 de Clinton. Lo mismo es cierto en los estados no competitivos.
Al menos a partir de estos datos a nivel estatal, no parece que ninguno de los candidatos esté subiendo el puntaje desproporcionadamente en áreas que ya eran amigables para él.
Biden ha publicado leads de más de 5 puntos en lugares como Michigan y Pennsylvania. Está por delante en más que suficientes estados para capturar 270 votos electorales, si las elecciones se celebraran hoy.
También podemos probar nuestros datos para ver qué sucedería si las encuestas subestiman a Trump como lo hicieron en 2016.
Lo que encontré fue que Biden aún estaría adelante, incluso con un accidente del tamaño de 2016.
Las encuestas subestimaron a Trump por 1 punto (RealClearPolitics) o 2 puntos (FiveThirtyEight) en el conjunto de los estados desde los que actualmente tenemos encuestas. Aplicando ese sesgo de 2016 a nuestros datos actuales, Biden tendría una ventaja de 6 a 7 puntos a nivel nacional.
Concentrándose solo en los estados competitivos, las encuestas subestimaron a Trump por 2 puntos (RealClearPolitics) o 3 puntos (FiveThirtyEight). Si las encuestas en los estados competitivos estuvieran fuera de lugar tanto como a fines de 2016, Biden aún estaría por delante en estados como Florida, Michigan y Pennsylvania.
Por supuesto, puede que no sea prudente esperar una era de encuestas del tamaño de 2016 en 2020. Las encuestas en estos estados que tuvieron importantes concursos estatales en 2018 fueron bastante imparciales. No importa qué conjunto de estados (todos o solo competitivos) y qué conjunto, las encuestas no fueron más favorables para los republicanos que el resultado final.
En un estado como Wisconsin, la encuesta final de Marquette de 2018 clavó el margen final del Senado y subestimó al candidato demócrata para el margen del gobernador por 1 punto.
El resultado final es la ventaja de Biden en este momento a nivel nacional y en los estados competitivos. La buena noticia para Trump es que tiene alrededor de seis meses para cambiar el curso de la campaña, que es tiempo más que suficiente para hacerlo.
Tomado de msn.com news con el traductor de gogle.
Artículo en inglesh
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