Parece mentira, pero todo lo que se está haciendo hoy en
día con el merengue es "retro". Nada nuevo…
En el espectáculo de El Casandra del pasado año, el
segmento del merengue fue una reminiscencia de Wilfrido con sus cantantes
originales, y el del anterior también.
Una especie de "los años dorados".
Víctor Roque reaparece con La Gran Manzana y lo primero
que procura es montar un espectáculo con sus integrantes originales, apelando a
la memoria colectiva como estrategia.
En este año en la producción del espectáculo de El
Soberano también se recurrió al pasado, con el junte de Los Rosario y Toño. Esas
orquestas están vigentes en el presente, pero con lo único que al parecer podían
motivar a la gente y justificar su presencia era con ese re-encuentro, un tanto
desfasado hay que decir.
Y como para que no quede duda de que el pasado es lo que
vale y se impone con el merengue en este tiempo, ahora se juntan en una gira
Johnny Ventura y Wilfrido, evocando una rivalidad que también existió en el
pasado.
Y que tocarán?. Los temas de antes, los de los viejos
tiempos…
Es malo eso?. De ninguna manera…Eso es lo que hay. Porque
lamentablemente con el merengue de este tiempo no se puede hacer nada que valga
la pena hoy día.
La fórmula se repite en todo lo que se hace, como se pudo
ver en la producción con Pochy Familia y la Coco Band original. De otra manera
no puede ser. La gente del merengue tiene que apelar al viejo repertorio hasta
en los bailes.
Hubo un intento con Toño "rockero" en Hard Rock Café.
¡Puro fetiche!. Un simple convencionalismo publicitario para llamar la atención
y atrapar a la gente…
Inevitablemente es la realidad que estamos
viviendo.
Así que levanten la mano derecha con el Zorro todos los
merengueros, y digan al unísono: !Que viva el retro en el
merengue!.
Claro, en lo que el "cienciólogo" musical Ramón Ortlando
termina de encontrar la fórmula del nuevo merengue en su laboratorio de
ensayos.
Tomado de Merengala
No hay comentarios:
Publicar un comentario